La espiritualidad es una ‘industria’ creciente

Es de mucha importancia encontrar, dentro de las megatendencias mundiales de este siglo, un espacio para el llamado Marketing Espiritual, que se va abriendo campo en medio de los empresarios y emprendedores Nacionales, aqui un articulo que servira de Ilustracion.

Las Mega-Tendencias Del Siglo Xxi
Recientemente, la firma de consultoría internacional Global Business Network publicó un interesante reporte donde describe cuáles podrían ser las tendencias que van a regir en el mundo durante los próximos años. Hacen referencia a futuras directrices en temas como la actividad económica, la salud, los servicios financieros, la demografía, el marketing, la tecnología, la educación, el medio ambiente y la política -entre otros.

Algunas de esas tendencias, que creemos pueden aplicar al caso colombiano, se listan y se comentan a continuación: * Internet ha sido reconocido y explotado como el primer y verdadero nuevo medio masivo. Poco a poco ha ido cambiando -y lo seguirá haciendo- de manera fundamental la forma en la que se comunican las personas unas con otras.

* Las economías del mundo desarrollado están atravesando por un profundo cambio. La actividad económica de vanguardia ya no es la administración de la información sino la innovación.

* Las compañías con políticas de empleo amigables para el trabajador (‘worker-friendly’) tendrán un mejor desempeño que aquellas que ignoran la creciente demanda de sus trabajadores por un mayor equilibrio entre las responsabilidades personales y profesionales.

* La combinación de conciencia social y búsqueda de beneficios para los accionistas, conducirá al crecimiento de las iniciativas empresariales con sentido social, donde todos ganan -tanto los dueños de empresas como los miembros de la comunidad.

* La diversidad cultural es el nuevo motor de la creación de múltiples mercados. Todos podremos estar viviendo en el mismo mundo y muy seguramente moviéndonos hacia una sola economía global, pero no existe -y no existirá- algo parecido a un consumidor global.

* El individuo se está convirtiendo en la unidad económica más importante. En los próximos años, el objetivo de la mayoría de las empresas no será ganar más clientes sino vender más productos a los clientes existentes.

* La alianza ‘empresa-sector educativo’ hará desaparecer en muchos frentes la división entre la academia y el mundo real. En el futuro, nuevos productos y nuevas ideas evolucionarán como consecuencia de los esfuerzos combinados por parte de los institutos de investigación, las universidades y las empresas.

* Existe un reconocimiento general de que los recursos de la tierra son frágiles y finitos, y que deben ser preservados para las generaciones que vienen. Hoy y mañana, toda iniciativa de desarrollo económico en el mundo debe regirse por los principios ‘reutilizable, reciclable y renovable’.

* La espiritualidad es una ‘industria’ creciente. El anhelo que se ha despertado en las personas por encontrar una guía espiritual ha sido la fuente de generación de muchas oportunidades de negocios para los empresarios con orientación religiosa. El renovado interés por una guía espiritual le ha dado paso a la masiva aparición de ‘entrenadores’ espirituales, a la bonanza de libros, de música y de actividades para enriquecer el alma.

* Hacer de las compras una experiencia más entretenida es la ola del futuro para los comerciantes. Ofrecer productos de calidad a precios bajos ya no es condición suficiente para captar la atención de los consumidores. La competencia es más fuerte que nunca, y por ende, los comerciantes buscan y buscarán desesperadamente diferenciarse de los demás.

* Las generaciones futuras tendrán más tiempo para el ocio, más ingreso disponible y un fuerte deseo por disfrutar de los beneficios de la abundancia. Los adultos adinerados y las personas pertenecientes a la denominada ‘generación X’ insisten en disfrutar la vida al máximo. Es por ello, que los productos y servicios de las industrias dedicadas a la diversión están gozando de un crecimiento sin precedentes -que continuará e incluso se acelerará.

* En los próximos años, la política del pragmatismo será la regla de oro. Las fórmulas económicas que produzcan resultados reemplazarán a las ideologías. Adaptarse al mundo y a sus cambios -sacándoles el máximo provecho, es el credo de los nuevos líderes del mundo.

* Se debe pensar en términos globales pero actuar en términos regionales; este será el mantra de estos tiempos. El siglo XXI será uno en el cual el regionalismo reemplazará al nacionalismo y en el que los políticos centralistas articularán una visión global de paz y prosperidad.

* Para concluir, afirma el estudio que la más importante de las tendencias es el nuevo comportamiento del individuo. Será más independiente y tendrá más responsabilidades que las que ha tenido a través de la historia. Será cada vez más un ‘ciudadano del mundo’ pero protegerá su herencia, su idioma y su cultura.






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